El 20 de diciembre de 2001 representó mucho más que una revuelta para expulsar a un presidente que había traicionado el mandato popular. El 20 de diciembre de 2001 constituyó la única pueblada en la historia argentina que puso en cuestión todo el sistema republicano. El 20 de diciembre de 2001 el Pueblo se levantó contra un sistema judicial corrompido hasta las huesos; se levantó contra un sistema de representatividad política hecho a la medida de los lobistas de las corporaciones del establishment mundial; se levantó en contra de los sindicatos que defendían los intereses de las patronales; se levantó en contra una democracia vacía y manoseada. Por ello el «que se vayan todos». Por eso el surgimiento de asambleas populares a lo largo y a la ancho de la geografía de un país en donde «el Pueblo no delibera ni gobierna, sino por medio de sus representantes». El 20 de diciembre de 2001 significó mucho más de lo que la historia oficial pretende decirnos. Desde el ECL estamos convencidos que, más tarde que nunca, el Pueblo saldará un reclamo que los guardianes locales del capitalismo global prefirieron desoír. Hoy más que nunca: solo el Pueblo salvará al Pueblo.